La sacamos regalada

Un silencio sepulcral se apoderó del camarín de Nacional. Aquel anhelo con que los tricolores habían llegado al Centenario de quedar a las puertas del título, e incluso los más optimistas de dar la vuelta olímpica ayer mismo, se esfumó por completo luego del cachetazo de River Plate.
La mayoría de los jugadores optó por no hablar. Los Morales, "Matute" y "OJ", se fueron caminando en soledad hacia el control antidopaje y cinco minutos después, sin bañarse, salieron todos juntos. El silencio los alcanzó también a ellos.
Gerardo Pelusso tampoco tenía muchas ganas de hablar. Fue el último en abandonar el vestuario y algunos conceptos, aunque no muchos, dejó al pasar mientras se dirigía hasta el ómnibus que lo esperaba para ir a Los Céspedes, donde el grupo pasó la noche y de donde ya no saldrá hasta que finalice el Apertura. "Este tiene que ser un momento de tranquilidad, de recomponer las cosas y seguir adelante. Esta es una situación límite, porque encaramos la definición del campeonato, pero para haber perdido nosotros y la posibilidad de definir el título la verdad es que tuvimos suerte, porque Danubio no ganó un partido que le fue bastante favorable, según la persona que nos pasaba la información. Lo concreto es que llegamos a definir en la última fecha los dos con el mismo puntaje".

El técnico tricolor dijo no irse preocupado con el rendimiento porque "las próximas horas serán para analizar y a lo mejor lamentarnos lo que no pudimos hacer, pero tampoco hay mucho tiempo para eso, porque tenemos 72 horas de aquí al próximo partido, porque esto se va a decidir rápido". Ya decididamente encarando la escalera del ómnibus, dio su contundente juicio de la razón por la cual ganó River: "Concretaron mejor las jugadas de ataque".
ROMERO. El ingreso de Adrián Romero fue una de las claves para que Nacional arrinconara a River en el complemento. "En el segundo tiempo, creo que jugamos mejor, porque manejamos mejor la pelota y llegamos más por las bandas, que fue lo que me pidió Pelusso y traté de hacerlo de la mejor manera. Se crearon las chances pero lamentablemente no se concretaron los goles, que era lo más importante. River hizo el gol y defendió muy bien, como lo hicimos nosotros en el clásico, pero nosotros tenemos que seguir mejorando para generar oportunidades más claras".

Por el titulo

Nacional tiene la chance de ser campeón si Danubio pierde y el tricolor consigue ganar. Título que tiene un significado deportivo, económico, político pero por sobre todo de darle una alegría a todo el pueblo nacionalófilo.

No es una final, pero puede tener el mismo desenlace. Lo saben todos. Los dos equipos que juegan en el Centenario y también los que estarán en el estadio Franzini.
Nacional puede dar la vuelta olímpica hoy mismo. Para ello debe derrotar a River Plate y esperar que Central Español le dé una gran mano ante Danubio.
El bolso llega a esta instancia con el fuerte envión de la victoria clásica. Pero, aunque parezca una paradoja, eso mismo puede jugarle en contra.
Por encima del viejo axioma futbolero que reza: "después de una gran victoria, viene el afloje", está clarísimo que el entusiasmo del clásico tendrá que quedar un poco de lado para que River no encuentre la brecha y le pegue el cachetazo de su vida.
Además, el cotejo tiene cierto "morbo", porque enfrente estará Juan Ramón Carrasco y con la posibilidad cierta de cortar el sueño tricolor de alzar la copa.
El destino quiso que la historia empezara a terminar así y los dirigidos de "JR" podrían convertirse en verdugos de los muchachos de Pelusso. Armas para lograrlo tienen y lo que es increíble es que el repunte darsenero llegó justo en las fechas finales.
Recuperado el buen manejo de pelota, la dinámica en el mediocampo y hasta el gol, River podría someter a los muchachos de Pelusso a un mal trance deportivo.
Sin embargo, hay en filas tricolores un firme compromiso grupal. La consigna es exponer en la cancha la misma actitud que les llevó a batallar con mucho temple la contienda clásica. Bajo ese rótulo y con el liderazgo de "OJ" Morales, Brum, Victorino, Medina y Blanco, Nacional irá por el paso que lo arrime al título.
Si el equipo responde, si aparece la generación de juego, hasta podría darse la hermosa recompensa de festejar en forma anticipada.
Danubio debe cuidarse de un posible embrujo
Es tan igual a una final como el otro partido que se disputará a la misma hora. Danubio lo tiene más que claro, porque si afloja un poquito se le esfuma el sueño.
Y lo increíble es que le pasa algo muy parecido que a Nacional, porque enfrente estará un equipo que ha repuntado muchísimo y que se muestra muy sólido en su esquema de juego.
La franja, además, va a intentar no caerse de la lucha por el título nada más y nada menos que en la casa de su eterno rival, Defensor Sporting, por lo cual deberá cuidar que no aparezca "ningún embrujo o hechizo especial".
Sin olvidar que en el último cotejo el equipo puso mucho coraje, pero careció del temple necesario para no sufrir la presión. Hoy los muchachos de Martín Lasarte no pueden darse el lujo de tener distracciones, de conceder ventajas. Si lo hacen, tirarán por la ventana todo lo bueno que hicieron hasta ahora, hasta los enormes esfuerzos desplegados para lograr que el objetivo no se cayera mucho antes.
Porque no puede ignorarse que Danubio ha sabido reponerse de circunstancias complicadas, como le ocurrió en el partido ante Liverpool en Belvedere, cuando estuvo 2-0 abajo en el marcador.
Los palermitanos, que ya fueron juez y parte de este certamen, dado que sacaron de la lucha por el cetro a Cerro, llegan también con mucha motivación.
Los hombres de Luis Garisto están consiguiendo dejar su huella en el certamen y tienen en sus filas a varios futbolistas que aspiran a pegar un salto profesional, por lo que el cotejo de hoy se convierte en una vidriera muy especial.
Sin perjuicio de ello, la franja está en condiciones de imponer su estilo de juego en el mediocampo y de ejercer una presión sobre la última zona palermitana como para adueñarse del partido. Es obvio, también tiene pinta de final.
ATENCIÓN A ....

Sergio Blanco: El "Chapita" viene de convertir el gol que definió el cotejo clásico y de buena racha contra las redes adversarias. Por movilidad, viveza para meterse entre los zagueros y proteger la pelota, más la habilidad de sacar un remate sin carrera, es letal cuando se encuentra en el área.
Henry Giménez: Está volviendo a ser el gran delantero que dejó su huella en el fútbol uruguayo, la que incluso le permitió ganarse un lugar en la selección uruguaya del maestro Tabárez. Tiene velocidad, buen manejo de pelota, inteligencia para abrir la cancha, potencia para meter la diagonal y, especialmente, el gol. El fondo tricolor deberá prestar mucha atención a sus movimientos.
ATENCIÓN A ....
Fabián Coelho: El volante regresó a las canchas uruguayas para demostrar que su técnica sigue siendo decisiva. Su capacidad para manejar el balón y meter precisos pases se han constituido en pieza fundamental de un equipo palermitano que sigue sorprendiendo en cada partido.
Jorge García: Es uno de los jugadores que provoca mayores dolores de cabeza en las defensas rivales. Para conseguirlo, suma capacidad para desbordar, buena moña para sacarse jugadores de arriba, un espléndido remate de pelota quieta y también en movimiento. Tiene temple y fuerza para ir arriba, llega al gol y no da pelota por perdida. Es un futbolista muy completo.

NACIONAL
Leonardo Burián
Pablo Caballero
Mauricio Victorino
Pablo Melo
Gastón Filgueira
Matías Rodríguez
Oscar J. Morales
Roberto Brum
Martín Ligüera
Sergio Blanco
Alexander Medina.
DT: Gerardo Pelusso.
RIVER
L. Dos Santos
Ibáñez o Flores
Pablo Tiscornia
Mauricio Prieto
Mario Rizotto
Jorge Rodríguez
W. Klingender
Diego Vitabar
Juan Ortiz
Nicolás Nicolay
Henry Giménez
DT: Juan R. Carrasco.
DETALLES
HOY: 20:30 horas (VTV)
Estadio Centenario
Arbitros: Darío Ubríaco, Miguel Nievas, Fernando Ríos y Daniel Fedorczuck. Precios: Tribuna Amsterdam $ 60; Tribuna América (puerta 25, River) $ 120; Tribuna Olímpica $ 90; Tribuna América $ 120 y Platea América $ 150. Nota: Los socios de Nacional tienen sus derechos suspendidos. Los menores hasta 12 años inclusive tienen libre acceso. Venta previa: Desde las 18 hs. se habilitan las boleterías del Estadio Centenario.

El País, La República y Bolsilludo.com

"Una revancha contra nosotros mismos"

"Cuando se gana hay que tener respeto por el adversario, disfrutar y festejar con mesura, sin ofender a nadie... Fue una revancha con nosotros mismos", Gerardo Pelusso, entrenador del triunfador clásico y puntero del Apertura.

El triunfo clásico cayó de maravillas en un vestuario que celebró y por partida doble: punta del Apertura y adiós definitivo del tradicional adversario...

"Había que ganar y se ganó. Cumplimos con la hinchada de Nacional y con nosotros mismos... Los clásicos son así, hoy disfrutamos el triunfo pero sabemos muy bien lo que se viene... Cuando se gana hay que tener respeto por el adversario, disfrutar y festejar con mesura, sin ofender a nadie... Hoy nos pusimos al día con nosotros mismos, fue una revancha con nosotros mismos. Ahora regresemos a Los Céspedes, a esperar por las dos finales que nos esperan para alcanzar el principal objetivo, el título del Apertura... En los primeros treinta minutos me gustó el equipo, por su actitud, por el dominio que ejerció sobre el rival y sobre todo porque salió a ganar el partido. Hasta la jugada de Ligüera -erró un gol en un mano a mano con Cavallero- fuimos superiores, ellos lograron emparejar el juego sobre el final. En el segundo tiempo, Peñarol no tenían otra que ganar, puso gente a arriba, jugaron con el viento a favor y por eso fue que mandé dos cambios juntos, para darle mayor energía al equipo. El "Morro" con su potencia, velocidad y fresco podía brindarnos cosas importantes y vaya si lo hizo... Peleó una pelota divida, se la llevó y le cometieron el penal. No vi porque lo expulsaron, pero es un chiquilín apenas tiene 18 años. Tiene mucho para aprender y mucho para dar... Ya nos dio un campeonato y a lo mejor con esa jugada nos dio otro. Fue un partido extraordinario de Burián y de toda la defensa", el análisis clásico de Gerardo Pelusso.

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"Venía esperando una actuación de esta magnitud, para demostrar que puedo ser el arquero de Nacional. Uno no es una máquina... El equipo se caracterizó en este torneo por ser un equipo contundente. No tenemos un juego vistoso, pero cuando llegamos pegamos duro y ganamos... Y así fue también en el clásico. Mi actuación sirvió para contribuir en la victoria, nada más. La primera pelota que le saqué a Núñez fue fundamental porque gané en confianza y me sentí seguro en el arco. La más difícil fue en el segundo tiempo, el tiro libre de Núñez. Llegué para desviar el balón y después pegó en el palo... Volvimos a la punta, dependemos de nosotros mismos y el objetivo es ganar el torneo", Leonardo Burián, en su actuación consagratoria aseguró entre sus manos los tres puntos clásicos.

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"Ganamos el clásico y volvimos a la punta, más no podemos pedir... Ganamos por la camiseta, por hambre de gloria y por el "Cachorro"... Burián es un fenómeno y en su gran actuación comenzamos a cimentar el triunfo. Por momentos se jugó bien, se manejó correctamente la pelota en ataque y no desaprovechamos la mejor oportunidad de gol que se nos presentó. No me puse nervioso en el penal, el arquero me habló, me dijo que se iba tirar a su izquierda, espere que se moviera y le pegué a su izquierda", Sergio "Chapa" Blanco, el goleador clásico.

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"Me estoy sacando el traje de hincha para volver a ponerme el de presidente, estoy con taquicardia, pero feliz... Confiaba en los jugadores y realmente nos brindaron un gran triunfo", palabra de Ricardo Alarcón, un presidente feliz.

Domingo de fiesta tricolor... Victoria clásica, punta del Apertura y el tradicional adversario fuera de carrera...

Leonardo Burian: "Nadie sabe lo que sufri en este tiempo".

El fútbol siempre te da revancha. Una frase que se debe haber inventado al tercer día de haberse creado el fútbol. Pero no por vieja deja de ser cierta. Y si no preguntarle a Leonardo Burián.

Nadie confiaba en él (salvo Pelusso y sus compañeros) y en la tarde de ayer fue el responsable del cero en el arco tricolor. Pocas semanas atrás le pegaron con un fierro luego de “comerse” los dos goles contra Liverpool. Hoy son todos elogios. En aquel momento había preferido el silencio, pero ahora necesitaba gritar a los cuatro vientos su verdad: “Es una revancha, es cierto. Tuve algunos comentarios en contra luego del partido con Liverpool que me dolieron mucho porque me trataron como si fuera un robot que no podía cometer errores. Soy humano y puedo fallar como cualquiera, pero hubo cosas que se dijeron que molestaron mucho”. Era evidente que “Cachorro” tenía el imperioso deseo de descargar muchas emociones juntas. Es de hablar poco, pero una vez que Larrionda pitó el final del partido siguió descargando: “Nadie más que yo sabe todo lo que tuve que sufrir en este tiempo para poder disfrutar como loco este momento. La vida de un futbolista es complicada en algunas ocasiones y para el golero lo es mucho más. En este momento no me puedo olvidar de la gente de Bella Vista donde estuve a préstamo dos temporadas porque ellos me hicieron sentir muy bien y gracias a ellos pude volver a Nacional”. El golero tricolor tuvo intervenciones seguros, concretas, sin fallas nunca. Pero... ¿cuál fue la más complicada de todas?: “La primera de Richard Núñez que la tapé bien y después el tiro libre que pegó en el palo estuvo complicada de resolver. Por suerte todo salió bastante bien. La primera jugada es la que te marca como vas a andar y a partir de ahí agarré mucha confianza”. Leonardo Fabián Burián Castro tiene 24 años y su contrato con los tricolores vence a fin de año. Su familia, radicada en Melo, vive la alegría a la distancia: “Se quedaron allá todos y miraron el partido por televisión. Ya me imagino a mi padre (William Burián) llorando sin poder parar”, dice con indisimulable orgullo el responsable del cero tricolor.

"Preparate ya falta menos..."

Mathías Rodríguez trabajó ayer en forma normal, a la par de sus compañeros, por lo cual se despejó la única duda que permanecía en la oncena de Nacional. Ahora sí Gerardo Pelusso tiene el equipo confirmado, armado y listo para el clásico y si persiste alguna interrogante es simplemente cuál será el rendimiento del equipo.
Los tricolores ya comenzaron a vivir plenamente el clásico, pues anoche mismo comenzaron la concentración. El técnico convocó a 19 futbolistas, entrando a la lista Jorge Cazulo en lugar del suspendido Roberto Brum.
Pelusso volvió a hacer hincapié en el trabajo defensivo y, durante un movimiento que fue bastante liviano, trabajó con la línea de cuatro conformada por Pablo Caballero, Mauricio Victorino, Pablo Melo y Gastón Filgueira, a la que se sumó Óscar Morales como volante tapón. Tal como lo hizo al inicio de la semana, el entrenador pidió atención a no dejar rivales sin marca en el área y evitar que los laterales sean desbordados. Pelusso reconoció que la causa del empate ante Cerro fueron los errores cometidos en defensa, los cuales intenta subsanar para un partido tan crucial como el clásico.
AUSENCIAS. No será una, sino dos las ausencias que deberá disimular Pelusso en el clásico. En la retaguardia no contará con Adrián Romero ni en el mediocampo con Brum. Se trata de dos piezas clave en el esquema de Pelusso. La más difícil de cubrir es la del zaguero.
El "Hueso" combina velocidad y precisión y, además, se complementa muy bien con Mauricio Victorino, conformando una última línea muy difícil de vulnerar porque ambos cubren muy bien todos los espacios. Pablo Melo, quien lo sustituye, no tiene la misma velocidad que Romero y por eso en el fondo aparecen más espacios. Incluso ocurre que muchas veces Victorino está fuera de posición por tratar de cubrir las espaldas de su compañero de zaga, lo cual genera desorden.
Los principales inconvenientes aparecen cuando Gastón Filgueira pasa al ataque. Al dejar descubiertas sus espaldas, Melo debe cubrir muchos metros y si debe salir a cortar juego unos metros más arriba de lo habitual suele cometer faltas que le cuestan la amonestación. Como ejemplo hay que citar que Melo es el jugador con más tarjetas amarillas del plantel: siete en 11 partidos. El mismo número de amonestaciones tiene Diego Arismendi (que por otra parte suma cuatro y si ve una en el clásico quedará suspendido para actuar ante River Plate), lo cual revela que el sector zurdo de la defensa tiene problemas de contención y muchas veces queda expuesto al punto de tener que cortar contragolpes con faltas.
En el mediocampo no estará Brum, sancionado por cinco amarillas. Sin embargo, allí Pelusso tiene varias opciones. Eligió la de trasladar a Mathías Rodríguez del lateral derecho a la zona media, dándole ingreso a Pablo Caballero al lateral. Con ello busca dotar de dinámica al mediocampo.
La ausencia de Brum fue un duro golpe para el técnico, que desde tres fechas atrás venía preparando el clásico con tres volantes de marca. Además, el "Teño" aporta buen remate de media distancia, lo que Rodríguez hasta el momento no ha mostrado.
Pelusso bien pudo haber optado por darle ingreso a Jorge Cazulo, un volante mixto, o por Nicolás Lodeiro. Sin embargo, se la juega por el argentino Rodríguez, pues es más ordenado tácticamente.

GENERACIÓN. La delantera de Nacional ha sido puntal en la campaña, pues pese a que el equipo no jugó bien la mayoría de los partidos, la cuota de gol no ha faltado y eso ha permitido ganar encuentros muy complicados. Sergio Blanco está en racha, el "Cacique" Medina transforma cada pelota en jugada de gol y el "Morro" García, que esperará en el banco, es todo potencia y oportunismo.
Da la sensación que si a la ofensiva se le generara un mayor volumen de fútbol, Nacional sería arrasador. Sin embargo, no ha ocurrido así.
Martín Ligüera volverá a tener la responsabilidad de guiar al equipo, ya que "Matute" Morales no está en condiciones de ser titular por cuestiones físicas. El argentino fue desequilibrante en los minutos que jugó, pero han sido pocos. Ligüera jugó bien ante Cerro, aunque más que un conductor fue un gran pasador. Con eso le alcanzó a Nacional para hacer tres goles.
Rincón tricolor Viera se quedó fuera de la lista de citados Confirmado: Alexis Viera no estará a la orden de Gerardo Pelusso para el clásico. El arquero, a quien una recuperación de una molestia en la zona de gemelos le demandó casi tres semanas, volvió a hacer arco ayer pero perdió mucho ritmo y coordinación, por lo cual no fue convocado. La diferencia es que esta vez se trata de razones técnicas y no médicas.

Hay 19 que desde ayer están en Los Céspedes
Además de los titulares, permanecen concentrados desde anoche en Los Céspedes otros ocho futbolistas, de los cuales uno quedará fuera de la nómina oficial. Oscar Castro, Walter García, Jorge Cazulo, Facundo Píriz, Nicolás Lodeiro, Ángel Morales (foto), Diego Vera y Santiago García quedaron a la orden de Gerardo Pelusso.

Tendrán minutos en tercera
Los jóvenes disputarán el preliminar Ocho futbolistas del plantel principal serán bajados a Tercera división para el clásico que obrará como preliminar. Ellos son el arquero Damián Bermúdez, los defensas Kendall Waston y Mathías Abero, los mediocampistas Diego Rodríguez, Maximiliano Calzada, Mauricio Pereira y Luis Oyarbide y el delantero Álvaro Apólito.

¿Que paso el ultimo clasico jugado un 14 de diciembre?

Hay un dato que para los hinchas de Nacional no debe pasar inadvertido. ¿Cuándo fue la única vez en el profesionalismo que el clásico se jugó un 14 de diciembre? Sucedió en 1941, cuando los tricolores le ganaron 6-0 a Peñarol, el triunfo clásico más abultado de la historia.
Ese mismo día, el preliminar de Tercera culminó con la victoria de los albos por 4 a 0, que desde entonces recuerdan ese día como el del triunfo por 10 a 0 ante el tradicional rival. Aquel día de hace 67 años, Nacional formó de la siguiente manera: Aníbal Paz; Romero y Rodríguez Candales; Luz, Eugenio Galvalisi y Gambetta; Luis Ernesto Castro, Fabrini, Atilio García, Roberto Porta y Bibiano Zapirain. Los goles fueron de Zapirain, Atilio García (2), Piñeiro (e/c), L. E. Castro y Porta.

Apurence que con un dia menos de venta previa agotamos la Colombes

No había banderas, gorros o camisetas a la venta. Tampoco largas colas ni aglomeraciones. Había sí, un extenso vallado perimetral que intentaba separar a los hinchas de Nacional y Peñarol que sacaban sus entradas a escasos cincuenta metros de distancia. En el medio, sólo dos policías a caballo. Nada más.
"En veinticinco años que llevo en esto no ví nada igual. Menos mal que no hay mucha gente y cuando vienen en barra, nosotros tratamos de ordenarlos, de informarles, de indicarles dónde tienen que sacar su entrada", dijo Gabriel Durán, encargado de los boleteros que expendían las localidades en las Tribunas Olímpica y Colombes del Estadio Centenario.
"Pusimos a once funcionarios para que colaboraran con la gente, para que no hubiese confusión ni problemas a la hora de sacar las entradas. Por ahora (las primeras horas de la tarde) no hubo un solo problema y todo marcha muy bien", señaló Durán mientras sostenía un `handy` en su mano derecha.
"Se vende bien, va aumentando a medida que pasan las horas. Yo creo que las tribunas populares se agotan entre hoy y mañana. La Amsterdam sale mucho más rápido que la Colombes. El domingo terminan las dos llenas", indicó Durán.
En la recorrida, nadie ofreció entradas baratas. Y sólo había un vendedor ambulante. "Yo vendo DVD de la hinchada. No hay jugadas, no hay goles, sólo gente, la hinchada cantando, bailando y saltando", explicó `Rafa`, integrante de la hinchada aurinegra. "Me gano la vida con esto. También los vendo el día del partido", agregó.
Las entradas de la Amsterdam salían como pan caliente mientras algunos desprevenidos elevaban tímidamente sus protestas: "no venden más que dos entradas por persona.. ¡y yo tengo que sacarle a cinco amigos míos que están laburando!", se quejaba Guillermo que ya había hecho varias llamadas desde su celular para comunicar la mala-nueva a sus compañeros de tribuna.
La venta en la Colombes era mucho más espaciada, más lenta. "Siempre pasa lo mismo pero se terminan vendiendo todas. No sé en qué va, pero generalmente se vende antes la Amsterdam. Después, el domingo, las dos aparecen repletas", señaló Aníbal Ríos, el jefe de boleteros, que estaba apostado en las ventanillas de la Colombes.
Sin clima clásico en el Centenario, los hinchas fueron sacando sus entradas sin problemas.
Con dos policías como custodias y varios funcionarios de Afrauf ordenando las filas que se formaban detrás de cada vallado, la jornada de ayer en el Centenario fue mucho más tranquila que de costumbre.
La venta continuará hoy, mañana y el domingo en las bollerías del estadio de 09.00 a 19.00 horas, en todos los Abitab y el día del partido, en el Centenario: de 09.00 a 12.00 horas en las localidades donde exista remanente de entradas.
Sin banderas, sin gorros y sin camisetas flameando pero con los colores latiendo en el corazón, los hinchas aparecieron frente a las boleterías con la misma ilusión de siempre.
Recibieron su entrada, la besaron y la guardaron como el tesoro más preciado. El domingo será venerada y conservada o será rota en mil pedazos.

A buen ritmo
La venta previa también se lleva a cabo en todos los locales Abitab. Y allí, al igual que en las boleterías del Estadio Centenario, las entradas se colocaron a buen ritmo. Habrá unas cuarenta mil personas en las tribunas.

Ya sin Amsterdam
La venta empezó lenta pero se fue incrementando a medida que pasaban las horas. Las entradas de la Amsterdam se fueron "como pan caliente", dijo a Ovación Gabriel Durán, encargado de Afrauf. "No hay más en los Abitab".

Una jornada muy tranquila
Las colas en las Tribunas Olímpica y Colombes no fueron muy largas. Ni siquiera hubo aglomeraciones frente a las ventanillas habilitadas para vender las localidades para el clásico del domingo. Los hinchas de Nacional y Peñarol cumplieron al pie del cañón y respaldaron a sus equipos.

Orden e información
Los integrantes de la Asociación de Funcionarios de Recaudación de la AUF se encargaron de ordenar e informar a los hinchas adónde tenían que sacar sus entradas. Una acertada medida, sin dudas.

Pocas Colombes
Las entradas en la Tribuna Colombes se van a terminar "hoy o mañana", aseveró Aníbal Ríos, jefe de boleteros, uno de los de mayor experiencia en este rubro. "El ritmo es más lento que el de la Amsterdam, pero se venden".

Desde esta jornada habrá venta previa de localidades para el partido clásico. Las mismas se venderán en el Estadio Centenario y en los locales de Abitab. Se hace énfasis en la información que dice que solamente se venden dos por persona porque este encuentro está considerado de “alto riesgo”. En el Centenario se venden en las boleterías de Tribuna Olímpica (hinchas de Peñarol) y en boleterías de Tribuna Colombes (hinchas de Nacional). El horario es de 9 a 19, hasta el sábado. En los locales de Abitab también es hasta el sábado y los horarios son los que rigen en cada local de venta.Los precios que rigen son los siguientes: Tribuna Ámsterdam (Peñarol): $ 120. Tribuna Colombes (Nacional): $ 120. Tribuna Olímpica: $ 250; Tribuna y Platea América: $ 300. Socios de Peñarol tienen libre acceso en todas las localidades, menos en la Colombes, pero deben canjear sus entradas. Menores de hasta 5 años: libre acceso. Canje para socios: en las boleterías de la Tribuna Olímpica, hasta el sábado, en el horario de 9 a 19.

Mañana hay que arrasar con las Colombes

A precios bastante elevados, quizá por el atractivo extra que significa ver por primera vez en funcionamiento el nuevo tablero electrónico del Estadio Centenario, se pondrán a la venta mañana las entradas para el clásico en las boleterías del escenario y también en los locales de la red Abitab.
Los boletos para las tribunas populares tendrán un costo de $ 120, las de la Olímpica de $ 250 y las de la tribuna y platea América de $ 300. Para los uruguayos resultan precios caros teniendo en cuenta lo que habitualmente se cobra, aunque internacionalmente siguen siendo bajos. Se debe tener en cuenta que una popular cuesta menos de US$ 5, cuando en Argentina costó US$ 7 para River Plate-Boca Juniors. La más cara tendrá un valor de US$ 12,1, mientras que para el superclásico argentino la platea costó U$S 43,6. Venta previa. Desde mañana y hasta el sábado se venderán boletos en el Centenario entre las 9 y las 19 horas. Las entradas para los hinchas de Peñarol estarán disponibles en las boleterías de la tribuna Olímpica, en tanto que las localidades para los de Nacional se colocarán en las ventanillas de la tribuna Colombes. Cabe recordar que los tricolores irán a esta tribuna y los aurinegros a la Amsterdam. Los socios de Peñarol tendrán acceso gratuito, aunque deberán canjear las entradas en la tribuna Olímpica, también de 9 a 19. Menores de hasta cinco años inclusive tendrán libre acceso a todas las localidades.

Caballero de blanco

Ya está. Gerardo Pelusso lo decidió y, a decir verdad, no hay ninguna sorpresa. Pablo Caballero será el reemplazante de Roberto Brum en la oncena de Nacional para el clásico, en lo que será la única variante que introducirá el técnico con respecto a la que enfrentó a Cerro el sábado.
La confirmación se producirá esta mañana, cuando los tricolores efectúen la práctica semanal de fútbol a puertas cerradas en el Parque Central. Allí el conductor parará el equipo y aparecerá Caballero, aunque todavía habrá una interrogante a despejar: en qué posición. Ayer de mañana, en Los Céspedes, hubo algunas pistas, aunque hubo que esperar para verlas en lo que fue un larguísimo entrenamiento cuya duración fue de dos horas y media. Luego de los trabajos de fuerza y potencia realizados en la cancha uno, el plantel pasó al campo dos para realizar ejercicios de cancha. Lo primero fue espacio reducido. Se formaron tres equipos. Con Burián y Castro como arqueros, de blanco estuvieron Píriz, Lodeiro, Ligüera, Victorino, Medina, Mathías Rodríguez y Santiago García. De azul lo hicieron Melo, "Matute" Morales, "OJ" Morales, Caballero, Romero, Diego Rodríguez y Blanco. De rojo vistieron Cazulo, Filgueira, Acosta, Arismendi, Walter García, Vera y Calzada. La regla era aprovechar a los jugadores ubicados en las bandas. Si ellos no las tocaban, no se podía rematar. De las formaciones no se pudo sacar en claro ninguna sociedad. por líneas. La paciencia tuvo su recompensa. Luego de un largo rato de fútbol en espacios reducidos, Pelusso convocó a todos los defensas y a Arismendi y mantuvo una charla. Allí pidió concentración para evitar que los delanteros rivales lleguen hasta el fondo y también que los zagueros presten más atención a la posición de los contrarios que a la pelota. "¡El hombre en el área, el hombre en el área!", gritó varias veces cuando atacaban los juveniles de cuarta división recordando su pedido. Sin embargo, lo más importante fueron las pistas. La línea de fondo se paró con Mathías Rodríguez, Victorino, Melo y Filgueira, con Arismendi como especie de volante tapón. Hasta allí todo normal. Sin embargo, uno de los que atacaba por la banda derecha junto a los juveniles era Caballero. Ese sí era un dato jugoso. Minutos después, Caballero y Rodríguez intercambiaron puestos. El primero pasó al lateral derecho con los titulares, vestidos con chaleco blanco, y el argentino a la zona derecha del ataque rival. Del otro lado de la cancha, bajo las órdenes de Mauricio Larriera (asistente técnico de Pelusso) trabajó la ofensiva. Más pistas, porque una dupla atacante la conformaron Blanco y Medina y otra Vera y el "Morro" García, en clara señal de que los titulares serán los primeros. Los volantes se alternaron para generar las jugadas de ataque, por lo que no hubo ninguna luz, pero no hay dudas en ese sentido. "OJ" estará en el centro del campo y Ligüera será el enganche. Si a eso se suma que Arismendi actuó junto a la defensa titular, queda por demás explícito que ya están los 11. Sin embargo, lo que aún no está definido es si Caballero jugará como lateral o como volante por derecha. ¿Un pálpito? Irá al medio. Por lo tanto, se puede afirmar rotundamente que Pelusso ya tiene a los 11 para el clásico: Burián; Rodríguez o Caballero, Victorino, Melo, Filgueira; Caballero o Rodríguez, Morales, Arismendi; Ligüera; Medina y Blanco. La confirmación oficial de este equipo aún no ocurrirá, pues entre otras cosas depende de que a Pelusso le guste lo que verá esta mañana en la práctica de fútbol, cuando además probará cuál es la mejor fórmula: Caballero como lateral o como volante. La cifra 9 CLÁSICOS jugó Caballero, con un saldo de 4 victorias, 3 empates y 2 derrotas

Baratitas las entradas...

Ayer, la Mesa Ejecutiva de la AUF dio a conocer los precios del clásico. Las Tribunas Ámsterdam (para los hinchas de Peñarol) y Colombes (para los de Nacional) tendrán un valor de 120 pesos, al tiempo que la Olímpica costará $ 250, y la Tribuna y Platea América $ 300.

El jueves, se habilitará la venta para el público en general, en el Estadio Centenario y en los locales de Abitab. Sólo se expenderán dos localidades por persona.Con respecto al clásico disputado en el Clausura 2008 (el anterior por el Campeonato Uruguayo), hubo un incremento en el precio de las entradas. En aquella oportunidad, las tribunas populares costaron 90 pesos, la Olímpica $ 190 y la América $ 270.

"Silvera hizo un mandado y me dejo sin clasico"

Las horas pasaron, pero la bronca de Roberto Brum por haberse quedado sin clásico en lugar de ir cesando va en aumento. El volante tricolor recibió su quinta amarilla este fin de semana y eso lo dejó fuera del partido con Peñarol del domingo que viene. Roberto Silvera fue el árbitro que sentenció su destino y por estas horas nombrarle a Brum al árbitro internacional es parecido a un insulto. Ultimas Noticias dialogó en la tarde de ayer con el volante uruguayo y allí descargó toda su bronca. -¿Estás más tranquilo; ya asimilaste que no jugás el domingo? -La opinión no cambió en nada y la voy a seguir sosteniendo. Esto fue un mandado. Roberto Silvera hizo un mandado, me sacó la quinta amarilla y me dejó sin clásico. Recién era mi segunda falta y él me dice que es por reiteración de faltas. Encima hizo un gesto de que era mi quinta falta y señaló los supuestos lugares donde las había hecho. No sé... estaba viendo otro partido. -¿Después de eso hablaron algo más? -Le hablé de manera muy fuerte todo el partido e incluso hice faltas que merecían que me sacara otra tarjeta y se ve que no se animó. Él solo quería mostrarme la amarilla y nada más. -O sea que buscaste otra tarjeta que nunca llegó a mostrarte... -Es un personaje, no le gusta que le hablen adentro de la cancha y el otro día en el partido entre Estudiantes e Inter de Brasil, Rodrigo Braña (de Estudiantes) lo insultó de arriba abajo y no pasó nada. Después vienen acá y no quieren que les digan nada. Parece una mujer, no quiere que le hablen. Debería copiar los buenos ejemplos que tiene a su alrededor para darse cuenta de lo equivocado que está. -¿Qué le decías en medio del partido? -Le dije de todo, incluso cuando se paró para tomar agua pasé por al lado de él y le dije que 'ya está, el mandado ya lo hiciste, arbitrá tranquilo ahora' y no me dijo nada. Al "Cacique" lo amenazó con que lo iba a echar en uno de los penales que cobró. Entró a sacarme del clásico. Tal vez la culpa fue nuestra porque hablamos mucho en la semana de este tema y todo el mundo sabía que si me sacaban una amarilla yo quedaba suspendido para el partido siguiente. -Si fue un mandado... ¿quién dio la orden? -No sé quién lo mandó a hacer esto, pero es evidente que fue de gusto. Silvera es un artista y le di muchos motivos más para que me sacara otra amarilla y no se animó a expulsarme. Sé que soy de hablar mucho en los partidos. Incluso Larrionda y Vázquez me lo han dicho en los partidos para que no me perjudique en el futuro, pero esta vez me sacó mal del partido. -¿Jugaste condicionado sabiendo el tema de las amarillas? -Mirá... sinceramente entré a jugar este partido sabiendo que iba a recibir la quinta amarilla. Lo digo de corazón, no ahora. Sabía que eso iba a pasar cuando me enteré que el árbitro era Silvera. -Y entonces... ¿por qué jugaste? -Lo que pasa es que no se podía pensar nunca en eso porque para nosotros el partido más importante del año en ese momento era el de Cerro y había que ganarlo como sea. Capaz que si la amarilla me la sacaba en el segundo tiempo, luego de varias faltas lo entendía, pero esto que hizo fue increíble. -Esta semana debe ser muy especial para vos... -No estoy bien, más bien me siento amargado. Cuesta mucho llegar a un cuadro grande y una vez que lo conseguís tu ilusión es poder jugar un clásico de titular. Ya estuve en dos anteriores donde no se me dio chance de jugar y me moría de ganas de estar en la cancha el domingo que viene. -¿Qué pasará con Silvera de ahora en más? -Ahora vamos a ver la profesionalidad de él cuando nos volvamos a ver en una cancha. -¿Porqué decís eso? -No le pienso hablar. Quiero ver si va a venir a buscar su revancha o si hace lo que realmente debe hacer en una cancha. Quiero ver la profesionalidad que tiene.

Color y Color

Faltan pocos días para que se juege un nuevo partido clásico por el Apertura.

Es un partido donde sin dudas también jugamos los hinchas.

En ese sentido estamos preparando un recibimiento como nuestra gloriosa hinchada merece.

Para que todos podamos aportar en esta movida esta abierta en Abitab, la cuenta colectivo 7411 a nombre de Forobolso.com.

Por mas pequeño que sea tu aporte todo sirve, solo tenes que ir y decir que queres depositar en el colectivo 7411, te piden un nombre y nada mas.

Les informamos también que todos los que tengan abundante papel picado lo pueden dejar en la portería de la sede de lunes a viernes hasta las 20.00 hs.

Los que concurran al estadio lleven su propia bolsa de papelitos y si consiguen rollos mejor.

Todos podemos ser protagonistas de una nueva gran fiesta tricolor, desde ya gracias por la colaboración y sobre todo gracias por la confianza.

FOROBOLSO.COM

Jugando horrible y contra 14 jugadores...

Capaz que no le sirve de mucho, porque hoy puede perder el liderazgo. Depende. Danubio -y, en parte, Bella Vista- tiene la palabra; pero la verdad es que ayer Nacional no quiso perder. Se rebeló. Y no perdió, nomás, un partido, que pudo haber perdido, al cabo de un trámite en cuyo 80% se vio superado notoriamente por su adversario.
Tal vez la única "ayuda" externa que recibió el equipo tricolor fue un gol que "se comió" Molina -y evitó Burián- cuando Cerro ganaba 3-2, en una incidencia que pudo haber cambiado el resultado; pero, aparte de eso, a Nacional todo se le hizo cuesta arriba. A saber:
1) Puso tres volantes de contención, como Brum, Arismendi y O. J. Morales, pero "no la cazó" (la pelota) "ni con un calderín", por lo menos -y quizá algo más, también- en los 45` iniciales.
2) Cuando ganaba 2-1, a poco de comenzar la segunda parte, Silvera no cobró un penal de Pallante a Blanco, lo que también pudo haber hecho que el partido tuviera otro desenlace, pero a favor del cuadro grande.
3) Fue dudoso el penal de Burián a Andrés Rodríguez, tras el cual Cerro se puso 3-2 en ventaja.
4) Cuando Nacional "remaba" alocadamente en pos del último empate, Pallante -que ya tenía amarilla- le hizo un foul "feo" a Ligüera, pero no fue observado y, por lo tanto expulsado, en un pasaje en el que el elenco tricolor ya insinuaba la posibilidad de llevarse a su rival por delante.
De manera que, al fin y al cabo, el cuadro dirigido por Pelusso "levantó todas esas cartas" con un empate agónico, casi dramático, que obtuvo tras un partido emotivo, cambiante en el score y sobre el final también en el trámite, y que por todas esas razones, como también las apuntadas antes, para Nacional fue importante.
No se puede obviar, lo de Cerro: con buen trato y circulación de pelota, una actitud protagónica, y girando sobre el ir y venir de Sebastián Suárez, la llegada de Dadomo por el flanco izquierdo del mediocampo y el ataque, y algunas maniobras de Molina y Rodríguez en el área contraria, "copó" la cancha en las 3/4 partes del trámite y pudo haber ganado; y si no lo hizo fue porque atrás "no aguantó la risa", no sólo al final, cuando Pelusso se jugó "hasta los calzoncillos" con un 3-3-1-3 en el que Lodeiro se ubicó en la línea de Brum y O.J. Morales, "Matute" quedó de enganche, y Blanco, Medina y el "Morro" jugaron en función atacante, sino tampoco en el primer tiempo, cuando Nacional se puso 1-0, pese a que "no la agarraba" ni equivocado. Además, tampoco se puede obviar la rebelión -futbolística, física y anímica- con la que Nacional superó muchas "contras" y logró un empate, hasta ayer muy importante.

¿El Colegio nos saco la roja este campeonato?

Al finalizar el partido el delegado tricolor Alejandro Balbi se despachó contra el arbitraje de Roberto Silvera y entre otras cosas expresó: "Me sorprendieron varias cosas, la amarilla de Roberto Brum, las invasiones en los penales de Cerro y el penal no cobrado a Blanco en el primer capítulo".
Más adelante agregó: "Por esta razón el lunes voy a pedir una reunión con el Colegio de Arbitros para hablar con los "muchachos" de la técnica para que me expliquen el arbitraje de Silvera y la decisión que habían tomado de designar a Prudente contra Villa Española, situación abortada por el propio presidente de la AUF".
Por último el delegado tricolor manifestó: "Se viene el clásico y quiero ganar o perder dentro de la cancha, fue esta una semana especial y el partido arbitrado por Silvera también fue muy "especial".

Del bolso desde la cuna

River Plate le dio una semana de licencia para disfrutar de los nuevos integrantes de su familia, los gemelos Franco y Facundo que vinieron al mundo el pasado 1° de diciembre. Sin embargo, y a pesar de que se despierta bien temprano para darle la mamadera de complemento a los bebés y esperar pacientemente que hagan "provechito" no se ha privado de ir a ver a Nacional, a Trouville y hasta al Olimpia de Minas. "Bueno, ¿pero quién se levanta a las siete para ir a entrenar y poder proporcionarles bienestar? Es como dice el dicho, zapatero a tus zapatos", se defendió el "Loco", mientras mostraba orgulloso a los más pequeños de la familia.
Franco pesó 2.790 kilos y Facundo 2.570. El padre estuvo presente en los dos partos anteriores, de Valentina y Diego, pero esta vez no pudo llegar a tiempo. "Estaba todo programado para una semana después. El domingo pasado me fui y a las dos de la mañana me llamaron ya que Paola había roto la bolsa. Era el peor horario porque de madrugada no hay vuelos. Me fueron contando todo por teléfono, que la internaron, que le pusieron la anestesia y a los 40 minutos me volvieron a llamar desde el quirófano para decirme que ya habían nacido. Al menos esperé la hora del vuelo tranquilo sabiendo que estaba todo bien", contó Abreu.
"Recién estamos en las primeras experiencias, pero los gemelos fueron una bendición única. Cada hijo es una bendición, pero el hecho de que hayan venido de esta forma tiene un significado especial. Y hay una parte que es jocosa, que da para la risa. Los primeros días tuvimos que agarrar una libreta porque no sabíamos si le cambiábamos los pañales y le dábamos de comer al mismo, porque son dos gotas de agua. El otro día la abuela se equivocó y puso a Franco en la cuna de Facundo. Pero a medida que van pasando los días les vamos encontrando algún detallecito diferente para poderlos identificar", relató Abreu quien trató más que nada de ocuparse de los dos mayores.
"Los he llevado al fútbol, al basquetbol y a algún asado. Al menos ayudo a la madre sacándole a los más grandes para que se encargue de los chicos", dijo el delantero mientras le explicaba a Diego, de cinco años, que esperara un poquito, que ya iba a ir a jugar al basquetbol con él.
"Por suerte ahora queda una semana y después tengo las vacaciones, entonces voy a estar 20 días más con toda la banda. Eso les va a venir bien a ellos, y además después nos vamos a Minas con los abuelos y toda la familia. Más que nada por el de cinco años, que es el que está medio perdido sin saber qué función va a cumplir ahora dentro de la familia. La nena ya tiene ocho y es la segunda madre que tenemos", dijo el delantero que ya tiene planeado cuando saldrán los gemelos a la cancha. Será en un partido muy especial para él, cuando Nacional y River Plate se enfrenten por la Copa Libertadores. En Montevideo los cuatro hijos del "Loco" saldrán con la camiseta tricolor, y en Buenos Aires, lo harán con la de River.
sin bastiones. A los 32 años, dijo encontrarse en el mejor momento, por experiencia y madurez. Sin embargo, le ha tocado vivir una realidad futbolística muy extraña. River Plate, está pasando el peor momento de su historia, pero él no puede ayudar, al menos dentro de la cancha. "No poder jugar es algo muy duro, primero porque me encanta jugar y después por la situación del equipo. Uno quiere colaborar y no sólo en la parte moral. Pero es algo que yo tenía claro cuando tomé la decisión de volver. Es cierto que quedamos anticipadamente eliminados de la Copa, pero estaba preparado para esto. En este momento tratamos de no terminar en la última posición para no quedar con ese récord, con esa marca negativa. Y en lo personal, lo que tengo que hacer ahora es prepararme de la mejor manera para cuando venga la pretemporada y comience la actividad, estar en la mejor condición posible", reflexionó.
"Al plantel se le fueron hombres, referentes, y quedaron varios muy buenos jugadores, pero muy jóvenes para asumir una responsabilidad importante. Y a veces se necesitan esas columnas, esos bastiones, que aunque futbolísticamente no respondan de la mejor manera, son un gran respaldo, una liberación para los demás", analizó a la hora de buscar una explicación a la desastrosa campaña de River.
CELESTE. A tres meses del próximo partido, ante Paraguay en el Centenario y con el equipo de Tabárez en el quinto puesto de la tabla de las Eliminatorias, el "Loco" está convencido que estarán en Sudáfrica. "No por un tema de moral, sino porque veo que hay una base, una idea, un funcionamiento, y nunca hemos sido superados futbolísticamente por ningún rival. Nos ganaron sí, pero nunca nos atropellaron, o nos hicieron cuatro o cinco goles. Siempre damos pelea y hemos ganado por goleada, pero nunca nos golearon. Y lo importante en el fútbol es estar cerca del resultado. No ser irregular y no lo hemos sido. Yo le veo un futuro muy alentador y espero que en marzo podamos dar el salto a los primeros lugares", afirmó.
Sin querer entrar en lo que le compete solamente a Tabárez, dio su impresión sobre la falta de enganche y los pedidos de citar a alguien que ocupe el lugar de Ignacio González. "Hay que adaptarse a lo que se tiene. No se trata de citar por citar, a lo loco, y terminar como en anteriores Eliminatorias con 80 jugadores citados. Si no tenés enganche tendrás que armar un esquema supliendo al enganche por otros jugadores en otras posiciones, que rindan y respondan. No se trata de citar a alguien sólo porque es enganche, hay que ver en qué momento está y si entra dentro de la ideología de lo que es la selección hoy en día, que por suerte ha cambiado mucho", finalizó.

Ayer, en Minas, volvió a ser el "Negro" Abreu
Ayer por la tarde Abreu se fue a su pueblo natal a ver la final del campeonato minuano entre su equipo, Olimpia, y Sportivo Minas. "Ahí dejo de lado todo el formalismo del futbolista profesional y me transformo en un hincha más atrás del arco. En el alambrado, con los tambores, le grito al árbitro y a los rivales. Ahí me saco el disfraz del "Loco" Abreu y paso a ser de nuevo el "Negro" Abreu, el mismo al que vieron nacer ahí", contó risueño.
También fue a ver a Nacional frente a Villa Española y Cerro, pero en esos partidos no se puede comportar de la misma forma. "Hay que cuidarse de muchos detalles. De repente gritás un gol y está la hinchada rival, y como hoy está todo el mundo muy loco, se malinterpreta todo. Hoy en día parece que se está esperando lo mínimo para insultar, en lugar de ver lo positivo. Entonces voy y me alegro con los goles, me disgusto con los del rival o con las derrotas, pero trato de mantener una cierta cordura. Alguna vez, en alguna final, el palco del estadio daba para la tribuna de la hinchada rival, entonces yo me iba al baño y gritaba el gol ahí escondido y después volvía como si nada. Hay que cuidar esos detalles para no tener que pasar un mal momento", contó.
"No quiero entrar en una historia de muchos detalles porque van a decir que le estoy dando para atrás al fútbol uruguayo. Y no quiero entrar en esa polémica, porque en definitiva cuando me junto con gente de fútbol de muchos años, hablamos y coincidimos totalmente. Tengo esa tranquilidad de saber que no estoy viendo las cosas al revés. Trato de evitar temas que no voy a cambiar, lo diga o no lo diga. Pero todo esto corrobora la decisión que tomé de no querer volver a jugar a Uruguay y muchas situaciones que han sucedido ratifican con creces que no estaba equivocado", afirmó.

En la íntima de los Abreu
Británico: Franco y Facundo Abreu nacieron en el Hospital Británico. Todo el sanatorio se convulsionó con la presencia del delantero celeste. Casi no podía disfrutar de sus hijos pues debía pasarse firmando autógrafos y sacándose fotos. Ni siquiera los hinchas de Peñarol se resistieron a su encanto.
El 13 presente: Como para quedar bien con su padre desde el principio, los gemelos vinieron al mundo exactamente 13 minutos después de las 4 del lunes 1° de diciembre.
Jardines: En la hermosa casona de Jardines de Carrasco, la cumbia sonaba fuerte en el fondo, donde el "Loco" se tomaba un cervecita junto a su tío Gustavo y su amigo Roberto, ambos llegados de Minas para conocer a los bebés.
Bolsos: Como no podía ser de otra manera, Franco y Facundo lucían batitas con el escudo tricolor bordado en el corazón.

Las dos nuevas locuras de Abreu

Nacieron dos nuevos bolsos, son Franco y Facundo, los gemelos del "Loco" y Paola.
El lunes 1º de Diciembre a las 4:13 hs. nació Facundo, y un minuto más tarde Franco, son los gemelos de la familia Abreu-Firenze.
Franco midió 47cm y pesó 2,790 kg y Facundo 48 cm y 2,570 kg. Ambos nacieron por cesárea en el Hospital Británico de la ciudad de Montevideo.

LOCO13ABREU.COM

Felicitaciones para la hermosa familia del Loco.
Les dejamos una foto que nos mandó un gran asiduo a la página llamado "bolsolocura1988" donde se puede apreciar el amor que tiene el loco por Nacional y por Uruguay.

Hoy arranca la venta previa

Comenzará hoy la venta previa de entradas para el partido entre Cerro y Nacional, con la salvedad de que si bien mañana también se expenderán boletos, no será en el Estadio Centenario sino en la AUF hasta tres horas y media antes del inicio del encuentro.
Entre las 10 y las 19 horas estarán a disposición de los hinchas de Nacional las entradas en las boleterías de la tribuna Olímpica del Estadio. La parcialidad tricolor se ubicará en la tribuna Amsterdam.
En tanto, en la sede de Cerro se negociarán los boletos para los parciales albicelestes (destinados a la Colombes) en el horario de 16 a 20 horas. En ambos casos, el valor de las entradas populares es de $ 80, mientras que la Olímpica cuesta $ 120 y la América $ 150.
Por razones de seguridad la venta de mañana será únicamente en las boleterías de la Asociación Uruguaya de Fútbol entre las 10 y las 14 horas. Quienes concurran al partido sin entradas no podrán ingresar, ya que no se habilitarán las boleterías del Centenario para la venta de localidades.
dudas cerrenses. Pablo Repetto esperará hasta último momento por Sebastián Suárez, afectado de lumbalgia, aunque su presencia al menos entre los titulares está muy complicada. Más factible es la chance para Raúl Molina en la delantera. Ayer a la mañana los albicelestes hicieron 30 minutos de fútbol y la probable alineación es: Muñoz; Núñez, Martínez, Pallante, Leites; Caballero, Pellejero, Trujillo o Suárez, Dadomo; Molina o Aliberti y Andrés Rodríguez.

Mauricio Victorino, Jorge Cazulo y Alexander Medina estarán ante Cerro. Se preservará a Roberto Brum para el clásico. Adrián Romero tuvo descanso. Gastón Filgueira, con malestar estomacal, entrenó diferenciado. Viera no se recupera. "Matute" hizo media hora de fútbol.

Pensando en Cerro y mirando por elevación el clásico, Roberto Brum no jugará el sábado por acumular cuatro tarjetas amarillas, por lo que gana espacio nuevamente Jorge Cazulo. En la zaga estará ingresando Mauricio Victorino, para hacer pareja junto a Pablo Melo, mientras que en ofensiva Alexander Medina entrará por Santiago García, manteniéndose Sergio Blanco. Si bien el equipo se estará viendo con más claridad el viernes, cuando se haga un repaso táctico, será con Leonardo Burián, Matías Rodríguez, Mauricio Victorino, Pablo Melo, Gastón Filgueira, Jorge Cazulo, Oscar Javier Morales, Diego Arismendi, Martín Ligüera, Sergio Blanco y Alexander Medina.

Pero yendo un poco más allá, Angel Morales hizo fútbol el jueves por la mañana y de acuerdo a lo que se dice en la interna, más allá de la lesión que quedó atrás, físicamente está en su mejor momento desde que llegó al plantel y es carta fija para el partido ante los aurinegros.

Sanidad... Haciendo un pasaje por la sanidad, Adrián Romero no entrenó el jueves. Estuvo en Los Céspedes, fue revisado por la sanidad, pero se le dio reposo. El jugador se sintió mal en el trayecto entre Los Céspedes y el Centenario. Tuvo vómitos y por eso quedó descartado del partido ante Villa Española. Ahora tiene dos fechas de suspensión.

Gastón Filgueira sólo realizó caminata junto a Kendal Waston. El marcador lateral tuvo también un cuadro de vómitos y diarrea, pero se entiende que llega sin problemas para el sábado.

Alexis Viera caminó y trotó junto al fisioterapeuta Walter Ferreira. No está pronto, cuesta su recuperación, lo que incluso lo pone en dudas para el clásico. "Cada vez que vamos a subir un peldaño, aparece el dolor y no nos permite que haga arco y en su puesto es fundamental. No hemos podido pasar de una etapa a la otra", explicó el doctor José Luis Luvizio sobre el golero.

Regenerativo y fútbol... El grupo de futbolistas se separó en dos para trabajar el jueves por la mañana en Los Céspedes. Los que actuaron ante Villa Española hicieron movimiento regenerativo, mientras que para los demás el plato fuerte del entrenamiento fue media hora de fútbol ante la Cuarta. Esa formación estuvo integrada por Oscar Castro, Pablo Caballero, Mauricio Victorino, Walter García, Diego Rodríguez, Gerardo Acosta, Facundo Piriz, Nicolás Lodeiro, Angel Morales, Diego Vera y Alexander Medina.

"El equipo dejo todo por la victoria"

Como pasó en la mayoría de los encuentros que ha ganado en el Torneo Apertura, Nacional no jugó bien (o no jugó lindo) pero volvió a ser efectivo, quedándose con los tres puntos más deseados de los últimos tiempos y recuperando la punta.
Sensaciones diferentes experimentaron los goleadores tricolores cuando regresaron al vestuario después del partido, uno de ellos radiante, feliz, plenamente satisfecho por su rendimiento en la víspera, mientras el otro se mostraba totalmente desconforme con su actuación. Sin embargo, ambos resolvieron bien dentro del área la chance que se les presentó, consiguiendo tres unidades que los pusieron de nuevo en el primer lugar.
Sergio Blanco, que tuvo unos minutos "a full", destacó que "acá nos entendemos todos los delanteros, con "El Negro" (García), con Liguera, con "el Viru" (Vera) o con "El Cacique" cuando le tocó jugar, con todos me sentí muy cómodo, porque todos trabajan para el equipo", y agregó sobre su estado de ánimo que "siempre que hago un gol estoy contento, en buen momento, como contra Danubio, contra Rampla, también hoy. Acá hay cuatro delanteros que están ahí que son espectaculares, que pueden jugar cualquiera, sumados al "Caute", que ahora está lesionado, y aprovecho para mandarle un abrazo grande."
Diametralmente opuesto era el semblante del juvenil "Morro" García, que llegó a su quinta conquista en lo que va del certamen, ya que estaba contrariado por su rendimiento: "Fue un partido complicado, que por suerte pudimos resolver a nuestro favor... Yo no tuve una buena tarde, no anduve bien, pero me voy con la imagen de un equipo que dejó todo para la victoria.
Acá los mayores nos inculcan que si no tenés una buena tarde tenés que trabajar para recuperarte en el próximo partido. Hoy lo único que hice bien fue el gol. Estuve peleado con la pelota, peleado conmigo mismo, así que me fui bastante caliente."
Finalmente, sobre su gol dijo que "dentro del área tenés dos segundos para resolver, así que lo primero a lo que atiné fue a hacer eso (una tijera) y me salió bien."
En la zona de vestuarios tricolor, cuando los futbolistas y el cuerpo técnico regresaban desde la cancha se enteraron del cambio en la fijación del partido del próximo fin de semana frente a Cerro ­se jugará el sábado en vez del domingo, como estaba previsto­, por lo que el preparador físico Javier Carballo reconoció que debían cambiar la planificación prevista. Después del partido regresaron a Los Céspedes, durmieron en el local de concentración y hoy entrenarán en horario matutino; debido al cambio de fecha, mañana por la mañana realizarán la práctica de fútbol en el Parque Central y al caer la tarde regresarán para quedar concentrados.

Volvimos a la cancha, tambien a la punta

Los tricolores volvieron a la punta tras derrotar a Villa Española por 2 a 0 en un partido en el que mucho tuvieron que ver los delegados de Nacional, al hacer jugar un encuentro que se había "perdido" en la Liga, cuando Prudente lo suspendió.
Nacional salió a jugar este encuentro con las reservas del caso, sabiendo que si bien estaba la punta en juego, tenía un equipo conformado como se pudo, con varios jugadores inhabilitados, lo que determinó incluso que Arismendi jugara de zaguero. A su frente Villa Española llegaba al Centenario con algunas bajas, lo que siendo un plantel corto se siente muchísimo más, pero de todos modos su técnico, el "Tiburón" Duarte, intentó conformar un equipo competitivo, que por lo menos intentara pararse frente a Nacional y le complicara la vida. Y lo logró en el primer cuarto de hora, cuando todo se hizo entreverado, muy cortado y sin que ninguno de los dos pudiera hilvanar una jugada más o menos interesante. Las faltas eran moneda corriente y la pelota estuvo más afuera que adentro del rectángulo verde. Blanco ­el mejor del campo a lo largo del partido­ escapó por derecha y sacó un zapatazo que hizo volar a Lucero Alvarez para que sacara el balón al corner. En la recarga fue el golero tricolor Burián quien se jugó la ropa para evitar el empate. Parecía que el partido cobraba vida y fue así, porque pocos minutos más tarde "el Chapita" escapa por izquierda, frena y engancha de taco para dejar en blanco a Garciullo y sacar un violento zurdazo para mandar el balón arriba contra el travesaño. Era el gol de apertura, el que abría la defensa de la gente de la camiseta a mitades, que marcando en defensa era bastante mediocre, por más que intentaba un interesante toqueteo de mitad de cancha hacia arriba aunque, también es cierto, sin esa precisión para el remate final. Con un gol de ventaja Nacional dominó el partido, con Blanco siendo figura e incontrolable para la defensa del Villa. Sin embargo el primer tiempos se fue con una mínima ventaja, pero bastante para lo que se podría prever. Villa española jamás puso en riesgo el triunfo de Nacional. Para el complemento, más de lo mismo, jugando Nacional a influjos de lo que pudiera hacer Blanco, quien seguía siendo la carta ofensiva más importante del equipo que orienta Pelusso. Hay que señalar que Nacional no tuvo en Liguera el hombre importante para la creación del fútbol y todo debió pasar desde los pelotazos de mitad de cancha para que los delanteros intentaran controlar algún balón, lo que hizo bastante problemática la resolución por parte de los delanteros. Sin embargo Nacional tiene peso y gol, porque hubo otra escapada de Blanco, esta vez por derecha para levantar un centro medido, para que "el Morro" García le pegara de tijera, picando el balón en el piso para elevarse y hacerlo incontrolable para el portero Alvarez. Era el gol lapidario. Villa Española no estaba capacitado para remontar tamaño score, porque no contaba con la fuerza suficiente como para llegar al arco de Burián con sensación de gol. Y el cronómetro disparó hasta el final del partido sin que se cambiara el resultado que determina un triunfo en la cancha y otro "triunfazo" en la Liga, porque de un partido perdido, los delegados tricolores lograron revertir la situación y hacerlo jugar. Tres puntos "en equipo" para volver nuevamente a la punta.

Entre amenazas y medidas volvemos a la cancha

A esta altura de las circunstancias y, obviamente, por todo lo que -incluido el tiempo, los días, ¡los meses!- ha pasado, no deberían caber dudas en el sentido de que el que jugarán Nacional y Villa Española esta noche en el estadio Centenario es el partido más esperado del campeonato.
Además, la trascendencia -o vigencia- del encuentro, pasa no sólo por lo que ocurrió, por todo lo que se habló y se habla, y hasta por quién debía arbitrarlo, sino también -y, fundamentalmente, al fin y al cabo- por el significado que va a tener el resultado, especialmente para Nacional, cuando se entra en la definición del Torneo Apertura, los tricolores están segundos a dos puntos detrás de Danubio con un cotejo menos jugado, y después de medirse con Villa Española los espera el choque con Cerro, que viene prendido en la parte de arriba de la tabla tras haber cumplido gran campaña y... el clásico. En ese contexto, entonces, es muy distinta la situación de ambos. En pocas palabras: Nacional es favorito "cantado". Por algo es escolta del líder, con un partido menos disputado, y tiene 22 puntos ganados, contra los "escuálidos" 6, que Villa Española -viniendo en el 15° puesto sobre un total de 16 participantes- ha sumado. Sin embargo, por todo lo anterior, por lo que se juega Nacional, por lo que -por qué no- también se juega el árbitro después de todo lo que se dijo acerca de lo que hizo o no hizo Prudente y de si era conveniente o no que volviera a ser designado, porque hasta hace 48 horas no se sabía si el encuentro se disputaba, lo que no representa el contexto ideal para prepararlo, y porque Nacional tiene algunas ausencias importantes y, en base a esas bajas, "aprontó" su regreso con un equipo que es el que pondrá Pelusso y que, ya fuera en las prácticas contra los suplentes o en amistosos informales, no anduvo bien y hasta no cosechó buenos resultados. Concretamente: no está Alexis Viera en el arco; falta Victorino, cuya reaparición le había dado otra solidez a la zaga; ya ha quedado más que probado lo que significa en materia de generación de llegadas la presencia del "Matute" Morales, que en esta ocasión no va a estar ni siquiera en el banco como si fuera un as en la manga que puede hacer jugar Pelusso si su equipo no llega con claridad al área adversaria; y arriba, Medina -que tampoco va a estar a la orden- es siempre el "Cacique", una amenaza de festejo con "flechazos" imaginarios en el momento menos pensado. Además, en lo que tiene que ver con Villa Española hay por lo menos dos "datos" que no son como para pasar por alto, pese a que se supone que también debería sentir mucho la falta de un "pícaro", que es la "manija" del cuadro : Fernando Cañarte. Es decir, por un lado, está lo que dijo el propio Gerardo Pelusso ayer de mañana: "De Villa Española rescato su sacrificio y entrega responsable, como también la dura lucha que, pese a muchas dificultades, le ha planteado a todos los rivales"; y, por otra parte, un antecedente más directo, aunque muy relacionado con lo que dijo Pelusso: como lo reconoció Mario Saralegui la noche que jugó contra Peñarol, el 3-0 en contra fue realmente "mentiroso" cuando -no hace mucho- el cuadro entonces dirigido por Pablo Hernández le planteó un partido parejo al otro grande. Además, mientras Nacional durante el "parate" de la actividad oficial no anduvo bien, no dio señales de haberse recuperado futbolísticamente del traspié sufrido ante Danubio como visitante; Villa Española en cambio venció a Liverpool y también a los de la franja. Por supuesto, es como dijo su nuevo técnico, Luis Duarte: "Son amistosos"; pero, también como apuntó el entrenador, esos resultados y el juego mostrado hacen que yo confíe más en los jugadores y que ellos también confíen más en mí como técnico. Además, han demostrado una actitud bárbara para cambiar el panorama".
ATENCIÓN A ....
Martín ligüera El enlace tricolor está regresando a su nivel. Al menos así lo demostró en los encuentros amistosos que Nacional sostuvo durante la suspensión del Torneo Apertura. Si funciona, puede ser pieza clave en el andamiaje del equipo. Marcel Novick Es uno de los hombres donde se sostiene el equilibrio del equipo. Marcel Novick es una de las figuras más importantes de Villa Española. Tiene ida y vuelta y puede ser desnivelante.